Tener claro cómo combatir la fatiga al volante es una de las cosas que hemos de tener presente todos los conductores cada vez que emprendemos un viaje de media o larga distancia por carretera. ¡Qué no te venza el cansancio!
El agotamiento es uno de nuestros mayores enemigos cuándo nos vemos en la necesidad de pasar muchas horas al volante. Por eso, tanto si te gusta viajar en coche como si trabajas dentro del mundillo del transporte es imprescindible que sepas como actuar antes de que la falta de energías haga mella en tu conducción y eso acabe desembocando en un accidente de tráfico.
El primer paso no es otro que descansar bien antes de iniciar cualquier trayecto que tengas planeado. Dormir tus ocho horas sería lo ideal pero si esto no es posible no debes estar en la cama menos de seis horas la noche anterior a tu viaje. ¡Apaga la luz de tu mesilla pronto y no te quedes hasta las tantas con preparativos de última hora!
Llegados a este punto quizás te estés preguntando qué es lo que has de hacer exactamente una vez que ya te has subido a tu coche. Aquí entran en juego las paradas obligatorias. Cada dos horas como máximo debes buscar un área de descanso o un lugar apropiado para detener tu vehículo. La duración de estos pequeños respiros para estirar las piernas ha de ser de al menos quince minutos. Si puedes permitirte parar media hora tanto mejor.
Tampoco hay que descuidar la comida y la bebida. Siempre se habla de lo importante que es beber agua o zumos para estar bien hidratado. Sin embargo, pocas veces se hace hincapié en que se deben hacer varias comidas en los trayectos largos para evitar que bajen los niveles de azúcar. Eso sí, no es conveniente que tengas el estómago pesado así que consume tus aperitivos con moderación.
Y si sientes que todo esto no es suficiente y necesitas una ayudita extra la música nunca viene mal. Intenta escoger una lista de canciones o una emisora de radio que no sea monótona y que tenga los cambios de ritmo que sean precisos para captar tu atención y mantenerte alerta.
Como ves, los trucos acerca de cómo combatir la fatiga al volante son fáciles de recordar y de seguir. Evidentemente, nada puede sustituir los efectos de un sueño reparador pero siempre es buena idea contar con algún as en la manga por si nos fallan las fuerzas en el momento menos esperado.
La fatiga no es algo que tomar a la ligera ya que puede provocar microsueños, reduce nuestros reflejos y nuestra velocidad de reacción ante cualquier imprevisto, nos impide concentrarnos e incluso hace que nos resulte más complicado tomar decisiones mientras conducimos.
Que las carreteras sean un lugar más seguro es una responsabilidad compartida de todos y cada uno de los conductores. ¡Sigue estas recomendaciones y pon tu granito de arena! Reducir los accidentes y llegar a destino sanos y salvos es nuestra recompensa.