Guardar la distancia de seguridad adecuada te ahorrará algún que otro susto al volante. Chocar con otro vehículo no es una situación agradable y para los seguros el culpable siempre es el conductor que va detrás. ¡Vamos a ver algunas medidas para evitar colisiones!
Cuándo se circula por carretera hay que tener en cuenta muchos factores. Aunque la distancia de seguridad que hay que observar respecto al vehículo de delante es sólo uno de ellos en el equipo de Autofurgo creemos que es importante ofrecer a los usuarios de nuestros coches y furgonetas de alquiler unas recomendaciones sobre el tema. ¡Reducir los accidentes viales es cosa de todos!
La mayor dificultad para cualquier conductor reside en que no hay una distancia predeterminada que respetar. Los metros que han de separar un coche de otro varían en función de factores como el tiempo, la velocidad a la que se circula, el agarre de la carretera…
Evidentemente, no es lo mismo frenar un día lluvioso en una carretera secundaria cuándo nos acabamos de sacar el carnet de conducir que si se hace un día soleado por una autovía recién asfaltada cuando llevamos años conduciendo.
En otras palabras, que a las circunstancias del momento hay que sumar nuestra pericia al volante. Prestar atención a la circulación es fundamental para no cometer errores y acercarnos demasiado al vehículo delantero sin darnos cuenta.
Tampoco hay que olvidar que el estado de nuestro vehículo influye de forma directa en nuestra forma de conducir. Por eso son tan importantes las visitas al taller cuándo nuestro coche o furgoneta tiene ya algunos años. ¡Los frenos y los amortiguadores han de estar a punto!
Como norma general, se puede decir que la separación recomendada en ciudad es de nueve metros si se va a 30km/h y de 25 metros si pisamos el acelerador hasta alcanzar los 50km/h. Esta cifra es la que sale si aplicamos la conocida regla del cuadrado.
Para entender esta fórmula es mejor poner un ejemplo. Si vamos a 60 km/h tenemos que quitar la última cifra y multiplicar ese número por sí mismo. Seis por seis es igual a treinta y seis así que esa sería la distancia de seguridad ideal que nos permitiría frenar sin peligro.
Como es lógico, en carretera la distancia entre un vehículo y el siguiente ha de ser mucho más grande porque se conduce a una velocidad mayor. Según datos de la DGT se tardan unos tres segundos en realizar una maniobra de frenado.
Este artículo no estaría completo sin mencionar la distancia de seguridad lateral. A veces, no resulta sencillo seguir un carril y desviarse aunque sólo sea levemente puede desembocar en un choque con el vehículo de al lado. Hay que fijarse en el ancho de nuestro vehículo con los espejos retrovisores desplegados para calcular el espacio que necesitamos.
En suma, la distancia de seguridad tanto frontal como lateral es nuestra aliada en los desplazamientos en coche por ciudad y carretera. Dejar espacio entre tu vehículo y los de los demás conductores no es complicado y evita desperfectos además de salvar vidas. ¡Conduce de un modo responsable!