Cuando se trata de la seguridad de los niños en el coche hay que extremar las precauciones. Los desplazamientos diarios al colegio o los viajes en familia durante las vacaciones son momentos en los que debemos circular con especial cuidado para que tanto los adultos como los más pequeños de la casa lleguemos a salvo a destino.
Estar bien informado acerca de las prácticas recomendadas que hablan de la seguridad de los niños en el coche es muy importante. Como imaginarás, un bebé o un niño no puede ir de cualquier manera en el interior del vehículo y hay que cumplir escrupulosamente con la normativa para proteger a los que más queremos.
Si tienes un bebé siempre has de colocar la sillita del coche en el sentido contrario a la marcha del vehículo. Esto tiene que ser así somo mínimo hasta que el niño alcance los nueve kilos de peso y tenga al menos quince meses.
Ojo, estas medidas pueden prolongarse mucho más en el tiempo. Son los padres los que deciden qué es lo mejor en función de cómo sean sus hijos. Los niños pueden viajar de espaldas hasta los cuatro años o los 18 kilos de peso.
Respecto a los niños de más edad hay que tener en cuenta es que si miden menos de 1,35 metros tienen que continuar utilizando la sillita del coche. No olvides que estos sistemas de retención están diseñados para sujetar a los niños en caso de que se produzca una colisión o se lleve a cabo una maniobra de frenado demasiado brusca.
Bajo ninguna circunstancia puedes permitir que los peques vayan en el asiento trasero sin estos dispositivos. Recuerda que la multa es la menor de las consecuencias posibles así que no puedes ceder nunca si tus hijos o tus sobrinos no quieren ir bien sentados.
Como ves, los principios básicos sobre la seguridad de los niños en el coche son muy sencillos y fáciles de cumplir. Y si tienes cualquier duda acerca de cuál es la sillita infantil que mejor se adapta a tu vehículo y a tu pequeño te aconsejamos que acudas a un profesional que pueda asesorarte. ¡La prevención es tu mejor baza en seguridad vial!