¿Te has preguntado alguna vez el peligro que representa la velocidad en un accidente de tráfico? Ir más rápido de lo debido puede tener consecuencias devastadoras como salir despedido del vehículo o golpearnos contra el volante. ¡Las prisas no son buenas consejeras!
Como sabes, respetar los límites de velocidad es muy importante tanto para evitar accidentes de tráfico como para minimizar las consecuencias de cualquier percance que podamos sufrir en carretera.
Hay que destacar un dato preocupante. Y es que gran parte de los conductores españoles continúa circulando más rápido de lo que marcan las señales y la normativa. Este es un mal hábito que hay que erradicar para que todos podamos disfrutar de nuestros viajes en coche con la máxima tranquilidad.
Seguro que alguna vez has oído a alguien decir que si se conduce por una buena carretera con un coche en perfecto estado no hay peligro de verse involucrado en un accidente de tráfico.
Esto es absolutamente falso ya que la experiencia demuestra que saltarse los límites de velocidad puede acabar en colisiones frontales, vuelcos, atropellos e incluso salidas de la vía.
Ojo, no sólo se trata del riesgo que implica superar la velocidad permitida. Hay ocasiones en las que incluso debemos extremar aún más las precauciones aunque las señales nos den luz verde para pisar más a fondo.
La primera circunstancia en la que se recomienda ir más despacio de lo habitual es en esos días con baja visibilidad. Conducir de noche, con niebla o con los cristales empañados por la lluvia añaden un extra de dificultad a nuestra capacidad de reaccionar en carretera.
En segundo lugar, los cruces y las curvas de la vía también representan un pequeño reto en el que más vale contar con unos segundos extra para evitar derrapar o golpearnos contra otro vehículo.
Recuerda que tener la preferencia no es garantía de que otro conductor no esté circulando de forma indebida. Debes estar atento y observar antes de ejecutar cualquier maniobra.
Para terminar, el estado de las carreteras también es un factor a tener en cuenta. Las condiciones en las que se encuentra el asfalto o el que se estén realizando obras son circunstancias determinantes a la hora de decidir hasta donde podemos llevar el velocímetro.
Como has podido comprobar, los efectos d ella velocidad en un accidente de tráfico no son cosa de risa. Lleva siempre el cinturón de seguridad, sigue las indicaciones de las señales y no tengas miedo de frenar en momentos críticos en los que un descuido puede salir demasiado caro.