Afortunadamente, son raros los días en los que entra agua en el motor del coche. Las fuertes lluvias pueden hacer de las suyas y estropear el sistema eléctrico o algunos componentes mecánicos del vehículo por lo que hay que estar prevenido ante estas circunstancias.
Como es lógico, un coche puede seguir funcionando con normalidad aunque tenga que lidiar con las precipitaciones. Conducir con lluvia es algo más complicado de lo normal pero eso no significa que tengamos que dejar en casa nuestro vehículo al primer signo de que se avecina un chaparrón.
No obstante, cuando se inunda el garaje o el nivel del agua en las carreteras es demasiado alto empieza a existir el riesgo de que se cuele agua en el interior del coche. Y ya puedes imaginarte que los motores de combustión y el agua no hacen buenas migas
Por lo general, los problemas más graves se presentan cuando el agua supera la altura de los bajos del coche. Si esto te ocurre lo mejor que puedes hacer es parar el motor lo antes posible.
El agua puede filtrarse a través del aireador de la inyección de gasolina, de la inyección de aire o del sistema de escape, por ejemplo. Esto puede ocasionar la rotura de alguna válvula e incluso el taponamiento del tubo de escape.
En caso de que haya entrado agua en el motor estando apagado lo mejor que puedes es hacer es no arrancar el coche. Te recomendamos que llames a la grúa para que transporte tu coche a tu taller de confianza. Este sencillo puede impedir que sufras una avería grave y ahorrarte mucho dinero.
Por supuesto, el agua también puede hacer mella en los componentes eléctricos del vehículo. La Unidad de Control del Motor, también conocida como ECU, suele ser la más afectada. La ECU es fundamental puesto que se encarga de controlar cuestiones vitales del motor como son la combustión, el carburante, las revoluciones o las emisiones.
Ten en cuenta que los vehículos más modernos cuentan con más componentes eléctricos de los que depende su buen funcionamiento. Por este motivo, las averías provocadas por el agua y la humedad son cada vez más frecuentes.
En definitiva, si entra agua ene l motor del coche hay muchas piezas del vehículo que pueden deteriorarse e incluso romperse. Si te sorprenden las lluvias torrenciales y crees que tu motor ha podido mojarse más de la cuenta la solución está en ir al taller cuanto antes. Las averías por humedad son algo serio y no conviene ignorarles si quieres seguir disfrutando de tu vehículo por muchos años.